Culiacán, Sinaloa, 15 de septiembre 2024. A cinco días de pugna entre dos facciones del
Cártel de Sinaloa, al menos 30 personas han sido asesinadas y 29 se encuentran
desaparecidas, decenas de automóviles han sido robados, otros tantos incendiados mientras
que las pérdidas en la economía rebasan conservadoramente los 6 mil millones de pesos y
amenazan con incrementarse ante la gran cantidad de negocios que han bajado sus cortinas
y suspendido sus actividades ante el miedo de empresarios y trabajadores de morir en
medio del fuego cruzado entre Los Mayitos y Los Chapitos, dos facciones en pugna del
Cártel de Sinaloa.
Tan sólo este sábado 14 y domingo 15 de septiembre, autoridades reportaron el homicidio
de nueve personas, de las cuales, cinco hombres fueron localizadas asesinadas a balazos,
con huellas de violencia, tiro de gracia y un sombrero colocado en sus cabezas, al sur de la
ciudad, sobre la carretera Culiacán-Mazatlán, cerca del Splash Club.
En la colonia Miguel Hidalgo, la Fiscalía de Justicia de Sinaloa, reportó la muerte a balazos
de una joven de 19 años de edad. Posteriormente se denunció que durante el hecho, al
menos tres personas fueron privadas de su libertad.
De la misma manera, se confirmó la muerte de tres personas por arma de fuego en el
municipio de Elota, Sinaloa.
Uno de ellos, es un hombre menor de 30 años, cuyo cuerpo fue localizado con proyectil de
arma de fuego sobre la carretera libre Culiacán-Mazatlán a la altura del poblado de
Conitaca; dos personas sin vida, un hombre y una mujer, también se encontraron asesinados
en el poblado Alta Rosa, en ese mismo municipio.
Según las autoridades municipales, los hechos ocurrieron entre la noche de este sábado 14
de septiembre y las primeras horas de este domingo 15.
En el poblado Bacurimí, zona centro de Culiacán, también fue localizado este domingo, el
cuerpo de una persona en avanzado estado de descomposición al parecer asesinado a
balazos sobre un camino de terracería que corre paralelo al canal denominado Los Arcos.
También este sábado, en las inmediaciones del parque Culiacán 87, fue localizado el cuerpo
de un hombre decapitado, posteriormente se encontró su cabeza humana en otra parte de la
ciudad.
Además, fue localizado otro hombre asesinado a tiros en el área de descanso de la estación
de gasolina ubicada entre el Splash Club y el Rancho San Román, carretera a Costa Rica,
en Culiacán. La víctima era un hombre de unos 35 años, complexión regular y tez morena
clara.
En el lugar en que fue encontrado, se han estado dando varios enfrentamientos entre bandas
rivales.
De la misma manera, autoridades de Justicia de Sinaloa, recibieron la denuncia de un
hombre asesinado al parecer con una herida cortante en el cuello cerca de un tiradero
clandestino de basura junto al Canal 7, entre Las Estancias y el Aeropuerto Internacional de
Culiacán.
El hecho se registró alrededor de las 6:30 de la tarde, cuando el cuerpo fue descubierto por
varias personas que transitaban por el lugar.
Hasta el momento, la Fiscalía de Justicia de Sinaloa, ha reconocido que desde el 9 de al 14
de septiembre han recibido la denuncia de unas 29 personas que han sido víctimas de
desaparición forzada y se encuentran en la lista del Comité de Búsqueda de Personas
Desaparecidas.
El hecho guarda relación con decenas de denuncias emitidas a través de las redes sociales
X. Hay quienes acusan a los grupos en pugna del Cártel de Sinaloa, de estar recurriendo al
reclutamiento forzado para engrosar sus filas de sicarios y enfrentar con mayores
probabilidades de éxito su defensa.
Esa denuncia no ha sido confirmada por ninguna autoridad.
En el marco de este enfrentamiento entre Los Mayitos, herederos de Ismael Zambada
García y Los Chapitos, como se denomina a la facción que lideran los hijos de Joaquín ‘El
Chapo’ Guzmán, ambos fundadores del Cártel de Sinaloa, actualmente presos en cárceles
de los Estados Unidos, se han registrado algunas escaramuzas entre las fuerzas armadas y
grupos del cártel.
Este sábado, elementos del Ejército Mexicano supuestamente se enfrentaron con civiles
armados en la colonia Bellavista, al sur de Culiacán, con saldo de al menos tres gatilleros
muertos y algunos vehículos decomisados lo mismo que armas de fuego. No hubo
detenidos.
De la misma manera, durante otro supuesto enfrentamiento de militares con civiles en
Culiacancito, cerca de la cabecera municipal de Navolato, el Ejército decomisó una patrulla
clonada, tampoco hubo detenidos.
En el curso de la madrugada de este domingo, las autoridades dieron a conocer el arribo de
vehículos con hombres armados en el fraccionamiento Porta Fé, a donde arribaron y
balacearon un domicilio.
No reportaron muertos ni heridos durante los hechos, aunque los vecinos revelaron que se
escucharon gritos y quejidos entre los habitantes del lugar.
Como ya ha sido público, desde el pasado lunes 09 de septiembre, en Culiacán se ha
desatado una escalada de violencia sin precedente, aunque las autoridades han tratado de
minimizar los hechos.
En un escenario de profundo temor y preocupación, los sinaloenses han sido testigos de
bloqueos de la ciudad por parte de grupos de hombres armados, quema de vehículos
obstruyendo los accesos carreteros a la ciudad y poblados rurales adyacentes.
El desfile de convoyes de hombres armados por la ciudad y sus comunidades y los
enfrentamientos a balazos, que han dejado una estela de muertos y heridos sin precedentes
y de los cuales las autoridades apenas han reconocido la existencia de treinta, aunque se
sabe que los grupos en disputa tienen por norma levantar a sus muertos y entregarlos a los
familiares o sepultarlos.
Sobre el tema, diferentes organismos de la sociedad civil como centros empresariales y del
comercio, han alzado la voz para exigir al gobierno de Sinaloa que pase de ser mero
expectador a la acción en apoyo de la ciudadanía y de las actividades productivas.
Al respecto, Julio César Silvas, presidente de la Alianza para el Desarrollo y
Competitividad de las Empresas, ADECEM, acusó que por cada dos días de cierre o paro
de actividades, como ha venido sucediendo desde el pasado 09 de septiembre, las pérdidas
rebasan los 1,500 millones de pesos.
Al respecto, Oscar Flores, dirigente de la Unión de Comerciantes en Pequeño de Culiacán,
acusó este miércoles que renunciaron al menos 2 mil trabajadores del centro de Culiacán
ante la ola de violencia.
Dijo que la mayoría, optaron por renunciar por el miedo a morir al quedar en medio del
fuego cruzado entre las bandas rivales.
Como se recordará, el pasado 25 de julio, Ismael Zambada García, fue secuestrado o se
entregó, todavía no se sabe, al gobierno de los Estados Unidos, dejando un vacío y al
parecer severos conflictos al interior del Cártel de Sinaloa, que ha dado lugar a un
enfrentamiento que parece no tener fin, quebrantando la paz de los sinaloenses,
principalmente en Culiacán, Elota, San Ignacio y Concordia.
Aún cuando en todo momento el gobierno ha tratado de minimizar los hechos, lo real es
que producto de esta situación, el gobierno de Sinaloa, encabezado por Rubén Rocha Moya,
ordenó suspender las clases en varios municipios donde las escuelas quedaron desiertas;
también ordenó la suspensión de la ceremonia oficial del Grito de Independencia,
programada para este domingo 15 de septiembre en la explanada de Palacio de Gobierno.
Junto con ello, la gran mayoría de las iglesias de la ciudad han mantenido cerradas sus
puertas aunque de manera un tanto subrepticia han estado oficiando misa.
Lo peor de todo, ha sido la decisión de la ciudadanía de mantener un encierro obligado por
temor a verse inmersa en un fuego cruzado.
El hecho ha tenido severas repercusiones en la economía, pues ante el insistente llamado
del gobierno de Sinaloa de que “son hechos focalizados” y cuentan con herramientas para
defender a la ciudadanía, algunos pocos comercios abren sus puertas, pero,
lamentablemente, muy pocas personas acuden a las compras.
Por más que las autoridades se nieguen a reconocerlo, en Culiacán se vive un ambiente de
guerra de baja intensidad cuyo fin todavía no se vislumbra.