Ciudad de México, 4 de Julio 2025. «Si en el juicio de Ovidio Guzmán salen imputaciones contra algunos persona de México, (el gobierno) de los Estados Unidos deberán ofrecer pruebas», consideró la presidenta de México, Claudia Sheinbaum.
En su conferencia «Mañanera del Pueblo», Sheinbaum también se refirió a Sinaloa, y señaló que la situación que se vive tiene que ver con la captura de Ismael «El Mayo» Zambada.
Al ser cuestionada por los reporteros, la presidenta crítico al gobierno de los Estados Unidos, pues dijo no entender su posición.
Destacó que mientras ese país ha definido «terroristas» a los cárteles mexicanos de las drogas y ha sostenido que «es su política no negociar con terroristas, por otro lado hace acuerdos con ellos», como sería el caso de Ovidio Guzmán López, apodado «El Ratón» y presunto miembro del Cartel de Sinaloa.
Dijo que debe quedar muy claro que en México hay una orden de aprehensión (en contra de El Ratón) y «que sí decimos esto, es porque nosotros combatimos también a la delincuencia organizada todos los días y trabajamos por pacificar el país».
Por alguna extraña razón, la presidenta no se atrevió a pronunciar el nombre de Ismael Zambada García, alias «El Mayo» y cofundador del Cartel de Sinaloa junto con Joaquín «El Chapo» Guzmán hace más de 60 años.
«Lo que pasa en Sinaloa, tuvo que ver con la detención…., (de Ismael Zambada), y la forma en que se dió la detención… de un…, miembro de la delincuencia organizada».
Al igual que Ovidio Guzmán, Ismael Zambada García, enfrenta un juicio por tráfico de drogas y otros delitos en Brooklyn Nueva York y próximamente comparecerá ante la Fiscalía de Justicia del vecino país.
En el caso de Ovidio Guzmán, este ha firmado un acuerdo de culpabilidad y deberá comparecer este nueve de julio ante la Corte de Chicago, también por delitos ligados al tráfico de drogas.
Analistas políticos consideran que un acuerdo de culpabilidad por parte de Ovidio Guzmán, viene acompañado de información relevante para el gobierno de México y Estados Unidos, pues implicaría poner en la mira una presunta colusión de políticos con el crimen organizado, lo que alteraría de manera sustancial el engranaje del gobierno de México.