Culiacán, Sinaloa, 30 de enero 2024. Al señalar que en las presas del estado, se tiene un
disposición de apenas el 29% de agua para riego, la cual se ve fuertemente mermada al
llegar a los campos de cultivo ante el alto grado de azolve de la infraestructura hidráulica,
el especialista de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Autónoma de Sinaloa,
Fernando García Páez, advirtió que constituye un verdadero reto para Sinaloa, sacar
adelante el ciclo agrícola Otoño-Invierno.
Urgen políticas públicas de optimización del agua
García Páez, especialista en Hidráulica de la UAS, señaló que la escasez de agua para riego
es cada vez más recurrente en la entidad por lo que planteó la necesidad de implementar
una política pública que permita una mejor optimización del agua para consumo humano y
uso agrícola.
“Esos niveles que están monitoreados en las presas corresponden a la superficie libre del
agua que se encuentra en los vasos, realmente hay un volumen que debería descontarse que
es el que corresponde al volumen del azolve acumulado dado su antigüedad a través del
tiempo”, observó.
Entre los cambios en la política pública de manejo del agua, García Páez sugirió que, en lo
sucesivo, el vital líquido se cobre a los productores por volumen y no por hectárea como se
hace actualmente.
Se desperdicia más del 46% del agua
Consideró que ante la escasez, “hace falta hacer un cambio y debería hacer un análisis de
los tipos de cultivos y no nada más producir por producir, debería hacerse un esquema
completo que involucre el agua, tipo de producción y las características de su
comercialización, para evitar excesos en la producción de algunos cultivos que puedan ser
no benéficos para el agricultor”, detalló.
El académico e investigador de la Facultad de Ingeniería de la UAS, sostuvo que la
eficiencia del uso del agua a través de los distritos de riego es de un 54% y que está más
que comprobado que hay un 46% del vital líquido que termina desperdiciándose.
“La optimización tiene que ver con que pueda haber un cambio para que todavía tengan
más oportunidad los agricultores, es un cambio del patrón de cultivos, en lugar de ser maíz
que su ciclo vegetativo es de 8 meses, pudieran ser otros cultivos como el cártamo que tiene
ciclos vegetativos más cortos y que consumen menos agua”, anotó.
Subrayó que, para garantizar mayores volúmenes de agua disponibles, se requiere que en la
Ley Federal de Aguas y sus reglamentos se contemplen premios para quienes cuidan el
agua y sanciones severas para quienes la desperdicien.
García Páez puntualizó que si estas políticas públicas se establecieran ayudarían en gran
medida a que los problemas se redujeran y los agricultores no estuvieran cada año con la
incertidumbre de saber si contarán o no con agua para sacar adelante las siembras.
Un reto para Sinaloa, el ciclo agrícola Otoño-Invierno; presas azolvadas y desperdicio del 46% de agua para riego: García Páez
