Las tácticas y tareas de los socialistas en el momento actual son las
siguientes:
El movimiento político social en México, se encuentra actualmente en un período de
elección de los gobiernos de la república, de diputados federales y por estados, de
senadores, de gobernadores, de presidentes municipales y de regidores.
En este contexto se presenta la iniciativa y esfuerzos de las diferentes organizaciones
políticas de la izquierda socialista para llevar a cabo el 18 de noviembre del presente año un
“encuentro de los socialistas” para reflexionar en la construcción de una organización
superior más allá de una coordinación de carácter frentista que puede culminar con la
formación del «Partido de los socialistas de México”.
Después de esto, que sería un gran paso hacia adelante, parece que el socialismo mexicano
ha agotado sus fuerzas y atrapados en las inercias retroceden y se encasillan a las viejas
formas de trabajo disperso, de organizaciones aisladas.
La propuesta de organizar el partido de los socialistas de México constituye un
planteamiento estratégico que facilita reunir sus fuerzas y organizaciones socialistas en un
terreno firme. Realizar esa unificación, elaborar las formas convenientes de unidad,
articulación y/o integración para dejar de lado definitivamente el ahora fraccionado trabajo
político localista para darle paso a la agenda política nacional: estas son las tareas más
inmediatas y esenciales de los socialistas mexicanos. En ese sentido, proponemos el
desarrollo de las siguientes:
Líneas de Organización Política
● Fortalecer la unidad y la organización de los socialistas, tanto a nivel nacional como
internacional, superando las divisiones y las disputas internas, y buscando la convergencia
con otras fuerzas políticas y sociales afines.
● Ampliar la influencia y el apoyo de los socialistas entre las masas populares, mediante la
propaganda, la educación, la movilización y la acción directa, mostrando la vigencia y la
necesidad del proyecto socialista frente a la crisis del capitalismo.
● Resistir y combatir las políticas neoliberales, autoritarias y represivas de los gobiernos de
derecha, que buscan imponer el ajuste, el recorte, la privatización, la precarización, la
militarización y la criminalización de la protesta social.
● Defender y profundizar los procesos de cambio progresista y revolucionario que se han
dado en algunos países de América Latina y el mundo, apoyando a sus gobiernos y
movimientos populares frente a las amenazas del imperialismo, el golpismo y el sabotaje.
● Impulsar las reformas democráticas, sociales y económicas que mejoren las condiciones de
vida de las mayorías populares, como la redistribución de la riqueza, la reforma agraria, la
nacionalización de los recursos estratégicos, la democratización de los medios de
comunicación, etc.
● Promover una transición ecológica y energética que enfrente el cambio climático y sus
efectos devastadores para la humanidad y el planeta, mediante el uso racional y solidario de
los recursos naturales, el fomento de las energías renovables y limpias, y el respeto a los
derechos de la naturaleza.