Hermosillo, Sonora, 7 de julio de 2025. Enmedio de un profundo dolor, familiares, colectivos de familiares de búsqueda de desaparecidos, de mujeres y de la sociedad en general, externaron su pesar por la forma en que les fue arrebatada la vida a las gemelas Meredith y Medelín, de 11 años de edad, a Karla de seis y a su madre Margarita, de 28 años.
Todas y todos, se sumaron a la demanda de justicia para las víctimas y exigieron a la Fiscalía de Sonora imponer la pena máxima para el o los responsables de tan arroz crimen.
Según la Fiscalía de Justicia de Sonora, este sería Jesús Antonio N , pareja sentimental de Margarita, quien les arrebató la vida en un arranque de odio incomprensible y actualmente detenido como presunto responsable del cuádruple homicidio.
CADENA PERPETUA PIDE EL PADRE DE LAS NIÑAS
Información difundida en diferentes medios de comunicación, muestra el rostro dolorido de Carlos Tapia, padre de las menores, quien pide la pena máxima para el homicida.
Aclara que hacía algunos años se habían divorciado, pero de cualquier manera amaba a sus hijas y tenía buena relación con su ex esposa. Las visitaba y convivía con las niñas.
Abordado enmedio de dos ataúdes de color rosa, donde descansan los cuerpos de las dos gemelas, mientras en otro se guarda el cuerpo de Margarita, la mamá, junto con Karla, la más pequeña, con lágrimas en los ojos, Tapia recuerda las palabras y la risa de sus hijas: «cómo olvidarlas».
Su voz se quiebra pero no su determinación y pide «cadena perpetua», para que un crimen de tal magnitud nunca mas se repita.
Este día 7 de julio, la Fiscalía de Justicia de Sonora difundió en los diferentes periódicos la fotografía de Jesús Antonio N., la pareja sentimental de Margarita y presunto asesino de la madre y las tres niñas.
Varios abogados entrevistados sobre el tema, han expresado que dado la gravedad del caso y conforme al Código Penal de Sonora, el múltiple homicida sería castigado con una pena mínima de 70 años de prisión.
Sin embargo, considerando la gravedad del caso por tratarse de tres menores de edad que ningún daño podrían causarle a el ni a nadie, además de que fue un crimen cometido con total alevosía y ventaja en contra de seres totalmente indefensos, adicionalmente a la pena por narcotráfico, la sentencia que podría alcanzar serían 180 años de prisión.
Hasta donde se sabe, señaló el abogado Joel Alonso Rodríguez, el Ministerio Público de Sonora, se prepara para imponer la pena más alta posible para este multi homicida.
«No sé trata de una simple venganza…, se trata simplemente de castigar la atrocidad del delito», dijo el abogado.
Como se dió a conocer, este sábado 5 de julio por la tarde, fueron localizados los cuerpos de las tres niñas, en un apartado paraje del Campo Grosella, ubicado sobre la carretera 36 Norte, unos 81 kilómetros de Hermosillo, Sonora.
Las niñas estaban abrazadas, como protegiéndose mutuamente de la atrocidad de una muerte tan temprana como injustificable. Una muerte a balazos. Ellas vestían de pijama y huaraches de plástico.
A unos tres kilómetros del lugar, cerca del entronque de la carretera que comunica Hermosillo con Bahía de Kino, un día antes, el viernes, 4 de julio, había sido localizado el cuerpo de Margarita, su madre, también abatida a balazos.