Diputada Paola Gárate. Ante una percepción irreal de atención a los problemas.
Culiacán, Sinaloa, 15 de octubre 2024. Al señalar que luego de 36 días de guerra entre
dos facciones del Cártel de Sinaloa, y dado la presencia de más de mil 300 elementos del
Ejército, 750 de Fuerzas Especiales, además de la Guardia Nacional y policías estatales, se
ha generado “una percepción irreal de que el problema se está atendiendo”, aunque sigue
imparable el número de homicidios y otros delitos, diputados del Partido Revolucionario
Institucional (PRI), y Movimiento Ciudadano (MC), demandaron a las autoridades
establecer una mesa de seguridad ampliada y restituir la presencia de las policías
municipales en la ciudad.
Lo anterior, como parte de un esfuerzo para restituir la paz y la tranquilidad de los
sinaloenses, en virtud de que no existen condiciones para que la ciudadanía acceda a una
vida normal, coincidieron Paola Gárate, dirigente del PRI y Sergio Torres, de Movimiento
Ciudadano.
Al tomar la tribuna en el Congreso del Estado, la diputada priísta lamentó que con los
desfiles de policías estatales, Guardia Nacional y el Ejército, se ha generado a nivel
nacional una “percepción irreal de que el problema (de violencia e inseguridad) se ha
venido atendiendo y que lamentablemente, la violencia sigue, pues tan solo este lunes 14 de
octubre, al menos 9 personas fueron asesinadas y 22 fueron despojadas de sus vehículos.
Para buscar una salida conjunta a la problemática, Gárate Valenzuela reveló que, en
reiteradas ocasiones ha propuesta al Ejecutivo del Estado la instalación de una mesa de
seguridad ampliada, a través de la cual diversos sectores de la sociedad civil pudieran
participar y aportar soluciones al problema, sin embargo no ha sido escuchada.
Sostuvo que, en estos momentos, los ciudadanos “somos víctimas colaterales de una
economía colapsada, del encierro obligado, del miedo y la ansiedad, por decir lo menos de
quienes tienen la suerte de no haber perdido un ser querido o estar en la terrible
incertidumbre de andar buscado un hijo desaparecido”.
A nivel general, “existe una percepción irreal de ver que llegan y llegan refuerzos militares,
Guardia Nacional , de ver helicópteros sobrevolando el cielo, de ver cómo se entrenan
vehículos militares blindados y fuertemente artillados pero los homicidios no paran; tan
solo ayer (lunes 14 de octubre) se registraron nueve asesinatos y 22 vehículos robados sin
hablar de un fin de semana que supera mucho esas cifras”, dijo.
Convocó a la Cámara de Diputado sobre la necesidad de generar conciencia y más allá de
posiciones ideológicas, se emita un acuerdo serio, con alcances que permitan tomar
acciones conjuntas, para responder a las justas demandas de los sinaloenses.
Dijo que los comerciantes, empresarios, agricultores, transportistas, amas de casa y
personas que han perdido su empleo o se han visto obligados a cerrar sus negocios
demandan soluciones y deben ser escuchadas sus propuestas sobre cómo se puede rescatar
la vida económica y social del estado.
Por su parte, Sergio Torres, diputado por Movimiento Ciudadano, lamentó que a 36 días de
iniciada la guerra entre La Mayiza y La Chapiza, para los sinaloenses “no se ve la luz al
final del túnel”.
Expresó la solidaridad de su partido con las familias que han perdido a un ser querido o
tienen un hijo desaparecido y ofreció ser portavoz de los comerciantes que han sido
víctimas de saqueos, robos, asaltos, que los ha obligado a bajar la cortina de sus negocios,
de los trabajadores que han perdido sus empleos, de los ciudadanos que han sido
despojados de sus vehículos, como parte de una situación de abuso, sin que se observan
acciones efectivas de las autoridades.
Durante su intervención en la sesión de la LXV Legislatura local, Torres observó que la
ciudadanía enfrenta el riesgo de salir y no regresar a casa, lo que obliga a planear las rutas
de salida y llegada del hogar, basados en la información de las redes sociales para saber en
qué lugar de la ciudad hay balaceras, tiraron ponchallantas o se instaló un retén de la
delincuencia organizada o un carro quemado bloqueando las vialidades.
Demandó a los tres niveles de gobierno que cumplan con su trabajo y den resultados sin
excusa ni pretexto y dejen de culpar al pasado.
Observó que en Sinaloa, ninguna familia se siente segura con calles y carreteras que un día
sí y el otro también son tomadas a la hora que se les ocurra a los delincuentes.
Señaló que por más desfiles que hagan los altos funcionarios del gabinete de seguridad
federal, con camiones blindados y rodeados con militares armados con rifles de alto poder
no hay condiciones de seguridad en Sinaloa.
Llamó al congreso a no ser apático a la situación que vive el ciudadano común y ponerse
del lado de la gente que sufre.
Criticó que, para colmo de males, autoridades del Ejército Mexicano, resolvieron desarmar
a los policías municipales, y con ello han dejado sin apoyo a comerciantes, empresarios y
ciudadanía en general, lo que ha derivado en el robo a los comercios, empresas y casas
habitación, así como vehículos, pues han dejado a la ciudadanía “a la buena de Dios”.
Consideró que los agentes municipales, en su mayoría son gente buena y trabajadora y su
trabajo hace falta en las calles, por lo que pidió a las autoridades resolver a la brevedad esa
situación.
