Culiacán, Sinaloa, 21 de noviembre 2024. ¡Arriba Culiacán…Arriba Sinaloa…! Retumbó
el grito desde la escalinata de Catedral al iniciar “Jalemos con la banda”, donde más de 250
músicos unieron sus flautas, tamboras, clarinetes, cornetas, saxofones entonando El
Sinaloense, en una jornada de apoyo y de protesta enfocada a recabar fondos para unos 800
músicos y meseros que han quedado sin ingresos luego de más de 90 días de violencia e
inseguridad que han provocado el cierre de cientos de restaurantes y otros negocios
producto del enfrentamiento entre dos bandas del Cártel de Sinaloa que luchan por la plaza
y que el gobierno no ha podido controlar.
El encuentro musical inició poco después de las 9:30 de la mañana y se extendió hasta
pasadas las cinco de la tarde y en este participaron bandas y grupos musicales de diversos
géneros tanto de Culiacán como de otras regiones del estado, dando lugar a “Jalemos con la
banda”.
El evento fue organizado por grupos empresariales y organizaciones civiles que
promovieron la entrega de ayudas en especie y en efectivo para estos trabajadores del arte
justo el día 21 de noviembre, pues al día siguiente, el 22, se celebra el Día de Santa Cecilia,
acogido por los músicos como propio.
Desde el templete instalado sobre la avenida Álvaro Obregón, el empresario restaurantero y
chef Miguel Taniyama, tomó el micrófono para llamar a los que pasaban por ahí a
participar en apoyo de las familias de músicos y meseros afectados por la violencia que el
gobierno no ha podido parar.
De manera particular, demandó apoyo para esas más de 800 familias de músicos, meseros y
otros trabajadores del arte, que hoy se encuentran sin ingresos a raíz del pasado 9 de
septiembre, cuando dos grupos del Cártel de Sinaloa iniciaron la lucha por la plaza y con
ello decenas de negocios, principalmente restaurantes, pequeñas fondas y comercios
cerraron sus puertas dejando en el desempleo a miles de trabajadores.
Frente al micrófono, Taniyama aludió al derecho de los sinaloenses a recuperar la paz, a la
vida nocturna, a ir a la playa, a transitar por las calles, con la plena tranquilidad de no ser
víctimas de levantones ni tener que quedar en medio de un fuego cruzado.
En el mismo sentido se expresaron a lo largo del día los animadores del evento que de vez
en vez gritaban con alegría al dar aviso de la ayuda que llegaba de lejos y de cerca.
“Tenemos en la línea a Julión Álvarez”, se escuchó a través del micrófono, cuando el
conocido cantante expresó su solidaridad con los músicos para darles una buena nueva:
¡media tonelada de frijol! Para sus compañeros que se encuentran en esta emergencia.
Por su parte, la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), donó 600 despensas y puso la
mano de obra de alumnos y trabajadores de la Facultad de Ciencias de la Nutrición quienes
coordinados con Taniyama, prepararon una tonelada y 200 kilos de aguachile de camarón
en apoyo de los músicos.
La ayuda de los sinaloenses obvio que siempre estuvo presente: un kilo de frijol, una bolsa
de pañales, una lata de leche, de atún, jabón para la ropa, todo es bueno en apoyo de
quienes alegran el alma de los sinaloenses en estos momentos aciagos donde muy pocos
pueden estar de fiestas en el marco de una gran tragedia y el luto de más de 500 muertos y
400 desaparecidos.
Juntos en una sola armonía músicos de 20 bandas sinaloenses, tubas, tambores, flautas y
clarinetes formaron un gran concierto; protesta musical ante el encierro autoimpuesto;
música que dice “sí pasa”, cuando no se puede salir a trabajar porque al caer la tarde la
gente se encierra en su silencio y no hace fiestas: “nadie nos contrata”.
Así, la vida de los músicos cambió y ahora los vemos deambular por las calles, en las
esquinas, en los cruceros para ganarse la vida tocando y apelando a la solidaridad
ciudadana, insuficiente ante el desempleo y la magnitud de la crisis en la ciudad en que
nada pasa pero pasa de todo.
Mañana será otro día.
